Primera reunión. Madrugada de lluvia. Viaje a Buenos Aires. Marzo anunciaba un comienzo de año movido. La primera ronda de producción, donde nos encontrábamos todos los ganadores de la categoría ‘Documentales para TV’ en el Canal Encuentro fue un duro cachetazo. Llegar como ganadores, con un jurado de lujo, y de golpe: Pum!
Al coordinador artístico Leandro Ipiña y a la productora general Verónica Fiorito sólo les bastó un par de minutos para destrozar el proyecto. Y desde ahí, empezó a crecer. Luego de varias discusiones con la productora delegada de Encuentro, Susana Fernández, el proyectó creció. Son aún muchas las ideas y vueltas. Pero, en breve, si todo marcha bien, estaremos en el canal del Ministerio de Educación de la Nación.
Aquí, algo del resultado de las discusiones… La idea de las Sustancias estaba bien, pero hubo una pregunta de Leandro que siempre resonó en el equipo: “¿Qué pasa cuándo la gente se junta? Desde allí, advertimos que además de tener grandes historias, siempre aparecía un colectivo, un grupo, un equipo que se sobreponía a las adversidades. Y, por lo general, las historias nacían en los ’90.
Cuatro capítulos. Cuatro historias. Una reunión. La gente se agrupa detrás de una idea atravesada por la sustancia más elemental. La idea puede ser imposible, creativa, osada, delirante, utópica, sensible. ¿Qué sucede cuándo la gente se agrupa?
A pesar de la exacerbación del individualismo de los '90, hubo gente que tuvo una idea y la compartió con un grupo. Personajes quijotescos que transitaron un camino interior. Mientras la Argentina dolarizada vacacionaba en Miami y se deslumbraban con la hiper modernización; fueron varios los que decidieron reunirse. Y nadaron contra la corriente. Superaron los no que estaban preestablecidos de ante mano. En una época de Mala Junta, ellos fueron por la Buena Junta.
Juan Mascardi, de madrugada...
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